sábado, 16 de mayo de 2009

“YO LOS MATÉ POR VENGANZAS Y SI ME TOCA PAGO POR ESO”

Lugar: Barrio Santander, Noroccidente de Medellín. Hora: Entre las ocho y las diez de la noche del siete de diciembre de 2003. Duván Andrés Bedoya Álvarez ha sido asesinado de un tiro de escopeta en la nuca cuando intentaba entrar a la casa de su abuela, su lugar de residencia habitual.

El 16 de enero de 2004, poco más de un mes después del homicidio de Duván Andrés, fue detenido en la estación de policía del Barrio Santander Luis Guillermo Gaviria Martínez, perteneciente a la banda Los Rancheros, consumiendo alucinógenos y sin documentos de identidad. Al ser llevado a la estación, es identificado como el asesino de Duván Andrés, quien pertenecía a la banda Los Aguapanelos, por Rodrigo Ruiz Rave, tío de la víctima; además de una menor testigo del crimen, quien reconoció a Guillermo como "morenito, bajito, se motila calvito… mas o menos gordito"; y de otros cuatro testigos, dos de los cuales afirman que Gaviria reconoció el asesinato delante de ellos. Además, éste reconoció que tiempo atrás había cometido el asesinato de Brayan Stiven Olarte Ruiz, y negaba el de Duván Andrés, ambos sobrinos de Rodrigo Ruiz Rave. Cabe agregar que el homicidio de Brayan Stiven fue investigado en otra fiscalía.

Si bien en un principio la familia Duván Andrés no deseaba colaborar con las autoridades, decidió hacerlo luego de que continuaran los atentados contra ellos. El informe de la fiscalía afirma que “al parecer por su baja cultura prefería tomar venganza y hacer justicia por su propia cuenta”. Extrañamente, un hombre llamado Juan Esteban Palacio Alzate, dio un testimonio auto-incriminatorio falso, en el que afirmaba que había asesinado a Duván dándole un tiro en la nuca a quemarropa, luego de darle un cachazo en la espalda, lo cual contrasta con el informe del forense que demuestra que el disparo se hizo a más de un metro, y no da señas de golpes o contusiones; contrasta además con lo que afirmaron los testigos y el acusado. Según la fiscalía “No se entendió ni se entenderá del porqué quiso hacerse cargo de un homicidio que no cometió”.

Por donde se mirara, Gaviria no tenía escapatoria, además de los testigos, La fiscal afirma que “Las conductas punibles quedaron debidamente demostradas con la necropsia, que demuestra que la muerte se produjo por un disparo de con un arma de fuego de carga múltiple, de atrás hacia delante”, además del hecho de que el acusado tuviera un changón (escopeta recortada) sin salvoconducto para portarlo (el changón está catalogado como arma de defensa personal), y que se sacaran del cadáver de Duván Andrés 13 perdigones correspondientes a este tipo de arma.

Gaviria manifestó a los agentes: “yo los maté por venganzas y problemas personales y si me toca pago por eso”. Todo se originó con la intervención de Duván y Brayan para convencer a un amigo de que no se dejara quitar la pensión del acusado, al parecer por medio de intereses usureros por prestamos de dinero involucrado en negocios de droga y armas, por lo que el acusado decidió “Vengarse y acabar con esa familia”. Esto además de que la banda Los Aguapanelos hicieran un atentado a Omar Alberto, hermano del acusado, y asesinaran a Alexander Gutiérrez, familiar lejano de Gaviria; hechos de los que estaban sindicados Duván Andrés y Brayan Stiven.

El homicidio en Colombia tiene de 13 a 25 años de sanción, y el porte ilícito de armas de fuego de defensa personal entre 1 y 4 años. Sin embargo, al carecer de antecedentes penales hay una reducción de pena, por lo cual el Juzgado Decimotercero Penal Del Circuito de Medellín condenó a Gaviria a 13 años, y se incrementó a un año y medio por el porte ilícito de armas de fuego de defensa personal, por lo que finalmente Luis Guillermo Gaviria fue condenado a 14 años y seis meses de prisión, que comenzaron el 16 de enero de 2004. Además, el acusado no tiene derecho a suspensión condicional de pena ni a prisión domiciliaria.

PATRIA, SOCIALISMO Y ARMAS

Hugo Chávez Frías. El comandante. El presidente. El líder. Amado por las masas, odiado por la clase alta. El amigo de Castro, de Irán y de los países árabes. El que le compra armas (incluidos varios aviones Sukhoi 30) al gobierno ruso. Chávez, el vecino. Desde 1998 está ejerciendo su mandato. “Porque yo he sido elegido, tres veces” como diría él mismo ante la callada que le propinó el rey de España. Chávez, entre odios y amores, no solo de su país sino de la comunidad internacional. Con su política de “Socialismo del siglo XXI”, lo sectores mas desfavorecidos de la población venezolana lo apoyan y le dan continuidad a sus mandatos. ¿Cómo es que ha logrado esto?

Los escuálidos y el pueblo
Al inicio de su primer mandato, o desde la campaña presidencial en 1998, Chávez parecía el candidato perfecto. Pondría fin a la corrupción del gobierno y haría inversión social para las clases mas desfavorecidas. Los medios lo subieron como palma, aunque todavía no han podido hacerlo caer como coco. Y en efecto fue así, la inversión social no se hizo esperar. Con las llamadas “misiones” las construcciones de lo que podríamos llamar viviendas de interés social beneficiaron a miles. Los escuálidos, como el presidente Chávez llama a la clase alta, y los pocos antichavistas de clase media, no estaban contentos. El hecho de que regalara el pavimento durante dos años a Bolivia fue un hecho que molestó. “Pues mira pana como están las calles – afirma Héctor Sánchez, ciudadano venezolano – Mientras los bolivianos andan tranquilos sobre nuestro pavimento, nosotros nos tenemos que aguantar los huecos y la polvareda”.

Claro, esto poco les preocupa a quienes se ven beneficiados con los programas del presidente. Según Sánchez, la gente está dejando de trabajar, para ponerse a estudiar cualquier cosa en la noche, ya que el gobierno les paga por estudiar. “el venezolano es perezoso, y si le pagan por estudiar es mejor que trabajar, así sea menos, lo mismo con los subsidios de desempleo.” afirma.

La clase alta por su parte ve con tristeza el deterioro de las calles y la invasión de tierras. “Chávez dio permiso de invadir todo lo que quieran, entonces ahora si tu vez Caracas, hay conjuntos súper bonitos y de clase alta rodeadas de puros tugurios. La ciudad se volvió muy insegura, mira los edificios. Hasta el piso 6, 7, incluso el 8 tiene rejas en todas las puertas y ventanas porque tu no sabes quien es tu vecino”, comenta Mauro de Andrade, ingeniero de Papeles Nacionales. La Guardia Nacional, pese a que se los encuentra casi en cada esquina no parece desempeñar muy bien sus funciones según lo que afirman tanto Sánchez como De Andrade.

Popularidad
El llamado Socialismo del Siglo XXI, la política de Chávez para llevar su país hacia un rumbo socialista pero incluyente, parece ser la clave del éxito de su discurso. Dirigirse a la parte mayoritaria de la población, que también es la más pobre, da buenos resultados. La gente aprecia las misiones y los esfuerzos del presidente (o el comandante) por ayudar a los mas pobres con soluciones como subsidios de desempleo y de estudio, aunque al entrar en Caracas se vean por todos lados avisos de “se requiere empleado”.

Las viviendas que construye para los más pobres han sido otro factor que lo ha ayudado, al menos con los medios que lo apoyan. Viviendas como las VIS colombianas, construidas en el estilo de una unidad residencial de casas pequeñas. Con la diferencia de que en Venezuela solo son “bonitas” las que dan a la calle. Las casas del fondo presentan serios problemas. Las mas visibles “las que ven las cámaras y los noticieros” se ven en buen estado, pintadas de blanco, con una valla gigantesca que auto elogia las acciones del gobierno. Al ingresar a las casas de la parte posterior, se aprecia lo que es en realidad la propaganda. Así como las de afuera son bonitas, las menos visibles y por así decirlo “arrinconadas” son oscuras, con fallas estructurales y de tuberías y electricidad. La maquinaria propagandista de Chávez es admirable, lo que muestran los noticieros y las fotos en los medios es eso bonito, ignorando lo que en realidad pasa. Probablemente el cierre de RCTV tenga mucho que ver con ello.

Parece, sin embargo que no es esto lo que hace tan popular y odiado al presidente Chávez, es su permanente enfrentamiento diplomático con los Estados Unidos. Su amistad con Fidel Castro y con los países petroleros, que justamente están en contra de Estados Unidos (Irán por ejemplo). Las constates provocaciones y declaraciones en contra del gobierno Estadounidense, lo hacen ver como un redentor solitario que alza contra la tiranía del imperio, al calificar al presidente de los Estados Unidos George W. Bush como “terrorista y genocida”, o “Mr. Danger” (Tal como aparece en un artículo de la BBC), y hacer caso omiso de las prohibiciones y declaraciones del gobierno de EE.UU. respecto a Cuba, su relación con los países de oriente medio y las armas compradas a Rusia. Poco le importa esto, incluso que la secretaria de Estado Condolezza Rice lo califique como “una fuerza negativa en la región”.

Las armas rusas
A este enfrentamiento y al intenso “patriotismo” que despierta el presidente venezolano, se suma la compra de armas a Rusia. Los encuentros entre los presidentes Hugo Chávez y Vladimir Putin han despertado el interés y el temor de los Estados Unidos, que impuso una prohibición de venta de armas a Venezuela, a la que Chávez hizo caso omiso, “Nosotros no andamos en ninguna carrera armamentista. Sí necesitamos algunas armas para defender nuestro territorio, las mínimas”, afirmo en una rueda de prensa en Londres. Según dijo para la AP el analista militar Mark Stoker, solo se trata de renovación de armas demasiado viejas, obsoletas, que es lo que hacen todos lo ejércitos.

Según el gobierno venezolano, esto solo responde al reemplazo de armamento viejo y de un armamento mínimo para defenderse, en parte de amenazas posibles y en parte de la guerrilla de las FARC, que según el gobierno “entran en su territorio y secuestran y asesinan soldados”. El argumento de un general venezolano es que “los gastos militares, el porcentaje de PIB que dedicamos a eso y el tamaño de nuestras Fuerzas Armadas, tenemos la mitad de medios que tiene en uso nuestro vecino inmediato que es Colombia.” Pero claro, ellos no tienen una guerra interna como si la tenemos nosotros.

Los Sukhoi
La compra de 100.000 fusiles Kalashnikov, diez aviones de transporte, dos botes patrulleros y 24 aviones Sukhoi-30, que son considerados los mejores aviones de combate del mundo desde los años 80, y como afirma el portal voltairenet.org, el portal de la red de prensa de los no alineados, “No hace mucho logró superar en velocidad y capacidad de fuego a los aviones de la cuarta y otras generaciones, como el USAF Lockheed F-16-C/D, Block 59/52 y el francés Dassault Mirage 2000-5”, siendo el F-16 el avión mas avanzado que se tiene en las fuerzas aéreas de Latinoamérica, en posesión de Chile y Colombia.

Los únicos aviones del planeta que pueden compararse en fuerza de ataque, hasta 8.000 kilos de armas, y maniobrabilidad son los cazas Mig, también de fabricación rusa, pese a que maniobras como el revés “cobra”, la vuelta “campana” y la combinación de ambos en ángulos extremos, mientras usan su armamento a toda potencia, no puede ser igualados por ninguna aeronave. Esos aviones son invencibles, como afirma el portal voltairenet. Con maniobras así el radio de ataque del Sukhoi puede alcanzar hasta 180 grados, comparado con 30 y 40 grados de los F-16 del ejército chileno y el colombiano, que no pueden usar el armamento en ángulos de ataque tan pronunciados.

El costo además infinitamente inferior al de los cazas norteamericanos, que solo comercializan el F-16, puesto que el F-22 está restringido al ejército de EE.UU. Eso sin mencionar su “performance” incomparable (velocidad de hasta 1350 km/h, y hasta 8000 kms. de recorrido con dos recargas de combustible); y sus armas (3 tipos de bombas, 4 tipos de misiles, y un cañón de 30 mm. La preocupación de Estados Unidos y Colombia no está exenta de argumentos, el aumento del poder militar del vecino país es en efecto preocupante. Solo los aviones ponen a temblar a cualquiera.

El presidente Chávez en definitiva parece ser una extraña combinación de elementos que hace que la clase menos favorecida lo quiera: Es un militar que también fue pobre, intentó un golpe de estado contra un gobierno corrupto, regresó y triunfalmente ascendió, con un carisma que despierta tanto amores como odios, que unos encuentran encantador y otros simplemente payaso. Se enfrenta abiertamente a los Estados Unidos, y bajo el discurso del Socialismo del siglo XXI, parece cobijar a los menos favorecidos de su país y protegerlos del poder del imperio. La compra de armas que acrecientan su poder militar es además un buen truco publicitario, que le da una imagen de mandatario poderoso y firme en convicciones, al tiempo que protege a su pueblo con estas mismas armas. Parece que el señor Chávez va estar pro largo rato, pues algo se le reconoce: sabe mover las fichas de su ajedrez político para que siempre estén en su favor.

AURA O LAS VIOLETAS: “LA TRISTEZA RONDA POR ESTAS PÁGINAS”

Aunque parezca difícil de creer, la obra de José María Vargas Vila me conmueve. Si, lo hace. Porque, como Shakespeare, pero más… crudamente, por decirlo de alguna manera, explota todo lo que tiene que ver con el dolor humano, la tragedia amorosa, y todas las consecuencias nefastas que estos dolores acarrean consigo. Cuando abordé por primera vez un libro de este autor, Flor de Fango, ya estaba advertido por la persona que me lo recomendó que no esperara una trama complicada, llena de ardides y giros en la que al final todos terminaban muy felices. No con Vargas Vila. Se me dijo que esperara un final, y no solo en esta, sino en casi todas las obras de este autor, en el que la mujer sufre las peores consecuencias. Yo esperaba algo similar a Shakespeare, lo admito, pero luego de leer Flor de Fango, me quedé totalmente estático.

Magdalena y el desamor
Luego de comenzar a leer el pequeño Aura o las violetas, estuve de acuerdo con Magdalena, una lectora compulsiva que conocí justamente en una biblioteca: “Cuando empezamos a leer un libro, nos hacemos una idea de cual podrá ser el final, y mucho mas si se trata de una “historia de amor”; siempre pensamos que el protagonista vencerá a todos sus enemigos y obstáculos, y vivirá feliz para siempre, porque el bien triunfa sobre el mal; pero no con Vargas Vila. En sus escritos el amor y el bien está ligados al dolor y a la muerte, en ellos la verdad no prevalece sobre la mentira, ni el amor lo puede todo. Aura o Las Violetas tiene el sello inconfundible de Vargas Vila: descripciones cortas, metáforas, y un total desapego por los finales felices, donde la protagonista muere no sin antes pasar por innumerables penurias. La obra es muy corta, pero de excelente calidad literaria, maneja un lenguaje sencillo, una trama continua, hace bastantes metáforas; lo que la hace indudablemente una obra excelente y muy, muy triste, como todo lo de Vargas Vila.”

Al igual que en la anterior obra que leí, la protagonista, Aura, muere al final. El desarrollo de la trama es relativamente simple. Narrada en primera persona, el personaje principal, un joven que nunca dice su nombre, cuenta toda la tragedia que rodea su amor con Aura, compañera desde la niñez. El joven hace un viaje a Bogotá a estudiar. Al volver de su viaje descubre que su amada debe casarse con un anciano para poder sobrevivir ella y sus hermanos, pues su madre padece de una enfermedad incurable. Al ver como ella se casa con un hombre al que no ama, el protagonista enferma gravemente. Al curarse, pretende olvidarse de aquella que aparentemente lo había traicionado, pero recibe una carta en la que el anciano, esposo de Aura, le pide que vaya a su casa. Al llegar, Aura yace en un ataúd, con un traje negro. Un viento frío que cogió al salir una noche del teatro la enfermó y se la llevó a la tumba, misma que cubren de violetas, flores favoritas de la joven, y a las que se hace mención en toda la obra. Finalmente, otro narrador hace mención que el joven protagonista no es enterrado junto a su amada, como el deseaba, pues muere en “las playas desiertas de un río casi ignorado”
[1].

Ascensión y la técnica
Ascensión Silva es profesora de español y literatura, profesión que le va muy bien a su literario nombre. Mientras fuma un cigarrillo, comenta: “Vargas Vila era un trágico. Más que el mismo Shakespeare. Siente desdén por la felicidad y el amor; y se enfoca en destruirlos. Uno creería que estaba frustrado por un amor imposible, o que le gustaba dar un mensaje a sus lectores, algo así como “no se molesten en buscar el amor de su vida, pues van a morir sin encontrarlo”. Eso, sin embargo, no le quita valor literario, que es altísimo.”

Vargas Vila era prohibido, cierto. A cada aparición de una obra suya, se levantaban agudas controversias, escándalos y rechazos, lo que ocasionó su prohibición. Esto hechos, claro, lo convertían en un escritor enormemente leído y muy popular. Su técnica novelística fue muy criticada por no ajustarse a los cánones literarios y morales establecidos en el momento. Era enemigo declarado de la tradición, de la Iglesia, del gobierno, le encantaban los equívocos, las frases altisonantes y los conceptos atrevidos. “Otra cosa es que su estilo y técnica fueran de pronto simplemente una estrategia, porque el desdeñaba a las instituciones políticas y a la Iglesia, entonces escribía en este estilo porque sabía que al ser prohibido lo iban a leer mas, es psicología inversa: entre más le digan a uno que no haga algo, con más ganas lo hace. Si esa era su idea, lo consiguió, y mucho, tanto que se le reconoce como uno de los grandes escritores de nuestro país e incluso de Latinoamérica.” Afirma divertida Ascensión, terminando su cigarrillo.

Algo del autor
Claro, aparte de esta obra, hay muchas otras, pues la obra de Vargas Vila es bastante voluminosa, y dentro de ella se destacan las novelas Flor De Fango y la trilogía Lirio Blanco, Lirio Rojo y Lirio Negro. Entre 1900 y 1903 escribió Rosa de la Tarde e Ibis, narraciones con las que alcanzó popularidad inmediata en todo el continente latinoamericano.

José María Vargas Vila nació el 26 de junio de 1860 en Villa de Leyva, Boyacá, y murió en Barcelona, el 22 de mayo de 1933. Luego de estar en dos guerras internas de nuestro país, viajó a Caracas, y en 1887 dirigió la revista Eco Andino, fundada por él. En 1878, junto con Diógenes Arrieta y Juan de Dios Uribe, fundó la revista Los Refractarios. Conminado por el presidente de Venezuela a abandonar el país, fue a Nueva York a trabajar en la redacción del periódico El Progreso; diario desde el que arreció sus ataques contra los tiranos de Colombia y Venezuela. Al retirarse del periódico, fundó la revista Hispano América, donde publicó varios cuentos que después harían parte del libro Copos De Espuma.


Las reflexiones de Pompilio
“Es difícil denominar Aura o las violetas con una sola palabra, pero si estuviera en la obligación de hacerlo, esta sería desventura, pues Vargas Vila fue un maestro en construir historias cargadas de una atmósfera trágica, dirigida por las pasiones extremas, el sentimiento de suicidio y el desconsuelo generado por hechos adversos al acto del amor.” Pompilio Peña, periodista, es la persona más fanática de Vargas Vila que conozco. Fue él quien me recomendó a este genial escritor, y quien me confirmo que esta primera novela es en cierta manera autobiográfica: “esta novela es una viva muestra del romanticismo que cultivaría en el resto de sus novelas, solo que ésta está contada con cierta sencillez triste pues, a diferencia de la dosis filosófica de Ibis y la carga sicológica de Lirio Negro, Aura o Las Violetas es una novela relativamente sencilla, donde se desarrolla la fatídica y dolorosa historia de un amor no correspondido por una última decisión: Aura decide el bienestar de su familia antes que el amor por el protagonista, que no tiene otro consuelo que el apoyo incondicional de su madre.”

En palabras del mismo Vargas Vila, escritas al inicio del prólogo para la edición definitiva, esto dice de su primera novela:

“¡Cómo tiemblan los recuerdos en las páginas dolientes de este libro!
Triste ronda de las páginas muertas impulsadas por el viento de la tarde…
Hay calor de ceniza en estas hojas…
Cenizas escapadas a un columbario
[2] fatal…”

“La tristeza ronda por estas páginas. Es difícil no sentirse tocado por la aflicción - que para los más fríos serían palabras patéticas - en primera persona, con ese lenguaje pomposo, lleno de metáforas y comparaciones poéticas del más bello romanticismo que no tiene otro objetivo que plasmar las pasiones más profundas.”

Porque iniciarse en Vargas Vila con esta obra
Lo que sorprende y atrapa de esta obra de Vargas Vila no es su complejidad en cuanto al tema, o a los nudos y giros de la trama, pues, como casi todas sus obras, ésta tiene un argumento muy simple, y con un tema que es recurrente: el desamor y el dolor que este causa. Lo que sorprende, a mi parecer, es un eficaz manejo del lenguaje, que recuerda a Shakespeare o a Dumas, con textos elegantes y bien construidos, con uno que otro adorno, y siempre con alusiones religiosas, (que bien pueden ser una burla a la iglesia) como “Estaba resignada con esa dulce mansedumbre con que debió inclinarse el hijo de Abraham para recibir el golpe mortal de manos de su padre, y la hija de Jefté para marchar al sacrificio”[3].

Otro elemento que atrapa en Vargas Vila es el ritmo que tiene la novela, no se queda quieta por decir algo, sino que hace descripciones sencillas que dan ideas vagas, como bocetos, que hacen que la novela avance, pues describir es detener la narración; él lo que hace es describir situaciones y algunos lugares, pero no se detienen a describir en detalle a los personajes. Por ejemplo, a Aura solo se la menciona como una rubia de ojos azules, y a una de las hermanas del protagonista, de cabello negro y largo.

Algo que vale la pena mencionar, Vargas Vila no hace literatura de denuncia, como Germán Castro Caicedo; sino que hizo periodismo de denuncia y crítica, en 1904 fundó la revista Némesis, en Nueva York, que usó para atacar las dictaduras latinoamericanas y al imperialismo norteamericano por medio de su pluma.

Vargas Vila no es un escritor de temas complejos, ni de juegos con el lenguaje, ni siquiera hace saltos en el tiempo. Su técnica es sencilla, una narración lineal, constante. Su manejo del lenguaje es impecable, aunque, como es lógico, algunas de las palabras que usa son arcaísmos en la actualidad. Lo que hace especial e inigualable a Vargas Vila entre los escritores colombianos es el hecho de tomar el amor y el dolor humano, ligarlos y escurrirles hasta la última gota en sus obras, haciendo sentir lástima por los personajes. Esos hechos y la impecable (e implacable) manera de Vargas Vila de narrarlos, de sacarles el jugo, hacen que las obras de Vargas Vila conmuevan, incluso más que las de Shakespeare.


BIBLIOGRAFÍA

- VARGAS Arango, Maria Isabel. Jose María Vargas Vila. Gran enciclopedia de Colombia. Tomo 10: Biografías II. Bogotá: Círculo de Lectores, 1994. P. 617 – 618.
- VARGAS Vila, José María. Aura O Las Violetas. Joyas De La Literatura Colombiana. Bogotá: Círculo de Lectores, 1984. P.9 – 63.

[1] VARGAS Vila, José María. Aura O Las Violetas. Joyas De La Literatura Colombiana. Bogotá: Círculo de Lectores, 1984. P.63
[2] Columbario: Conjunto de nichos en los cementerios (Diccionario de la RAE)
[3] VARGAS Vila, José María. Aura O Las Violetas. Joyas De La Literatura Colombiana. Bogotá: Círculo de Lectores, 1984. P. 39

UNA TORMENTA DE ACERO: www.metalstorm.ee

Es un directorio, un buscador, una agenda de eventos, un archivo histórico. Es el directorio de Bandas de Metal más grande de la Web, diseñado y administraod por un solo hombre: Ivan, un hombre de 27 años ubicado en Tallinn, Estonia. En las F.A.Q. dice: “Metal Storm fue fundado en el otoño de 2000, por Ivan, para un propósito completamente desconocido.”

Aún sin un propósito, esta sitio ha conseguido, como pocas enganchar a los amantes del metal. Mejor dicho, que hablen los registros:

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Tiene, además, una emisora en línea que transmite música de las bandas registradas, y a la que cualquiera puede acceder. Y hablando de canciones, periódicamente esta página lanza recopilaciones en MP3, que solo pueden ser descargadas por sus miembros. Lo único que le falta a esta gran página serían las líricas de las bandas, solo eso. Tiene todo lo que los amantes del metal, buscamos, y un poquito más.